VACÍO Y SOLEDAD

 VACÍO Y SOLEDAD

Cuando empiezas una terapia tienes la esperanza de que cada día que pasa te vas a encontrar mejor. La tristeza se va disipar porque detrás de las nubes está el sol. La ansiedad se diluirá puesto que el amor lo puede todo. El miedo sucumbirá ante la fuerza de tus intenciones valerosas.  La incertidumbre desaparecerá mediante nuevos proyectos. Y todo esto, sin un solo altibajo.

Sin embargo, sin previo aviso una mañana te arrolla una sensación de vacío. Y cuando el día se va ensombreciendo y tu mente le hace compañía, la única salida válida que encuentras es derrumbarte en el sofá y taparte con una manta. Tu único deseo es que se apague el mundo y que no te avisen si acaso vuelve a ponerse en marcha. 

Tu antigua vida se desmorona y no encuentras ni un solo asidero al que agarrarte. Sin luz, sin camino, sin futuro. Solo un presente huero y sin sentido. Y la esperanza se diluye en un mar de confusión y de anhelos destruidos. Y si eres tú quien tienes que salvarte a ti mismo, estás absoluta e irremediablemente perdido. Y si la salvación depende de otros, que no llamen a la puerta.

Sí, en los procesos de cambio hay días así. Hay que dejarlos pasar. Permitirnos languidecer también es parte de la transformación. No siempre las herramientas que conocemos dan el resultado esperado o no siempre tenemos la entereza para utilizarlas. Y no pasa nada. Es normal si alguna que otra vez necesitamos descansar de tanto optimismo y saber hacer. Ya pasará y volverá a salir el sol; y los pájaros, a trinar. Pero hoy no; hoy es tu día de bajón, pues vale.

Quien te diga que salir del pozo es muy fácil es que nunca ha estado ahí abajo, solo y en la oscuridad. A veces no es sencillo, ya que las circunstancias no se atienen a nuestros deseos. Sin embargo, si cuentas cómo te sientes, puede que halles alivio. Porque al expresarte los miedos y la incertidumbre se hacen visibles y esta presencia les da luz y así disminuyen; los fantasmas pierden fuerza; y recobras fuerzas y confianza en que podrás aguantar el momento de transición hasta que lleguen tiempos mejores, pues siempre llegan.

Ascensión Menchón García

Maestra y terapeuta de Reiki

Terapeuta de masaje Metamórfico

Si necesitas más información o quieres solicitar cita para una sesión de Reiki o Metamórfico ponte en contacto conmigo a través del “Formulario”, a la derecha de este artículo, o en la pestaña “Contacto” de este blog.

Deja un comentario sobre este artículo. Me gustaría conocer tu opinión sobre el mismo, aunque tengamos apreciaciones diferentes. Sígueme en facebook.com/ascension.mg y en twiter @Ammagnetica